La interpretación en psicoanálisis se fundamenta en principios, no en recetas. El corte, como una de las modalidades de interpretación destacadas por Jacques Lacan, está en el corazón de la experiencia analítica. ¿Qué implica dicha operación de corte, bajo transferencia, en el marco de una sesión analítica? ¿Cómo concierne al analista? ¿Cuál es la diferencia entre alusión, puntuación, citación, resonancia, equívoco?
De cara a las XIII Jornadas de la NELcf “Cortes e Interpretaciones” , el Ciclo de Conferencias propuesto será una oportunidad para abordar estos problemas fundamentales que atañen a la teoría y la clínica.
En esta vía, se propiciará un espacio de trabajo abierto, desde la Escuela hacia la ciudad, convocando a todos los interesados en el psicoanálisis de orientación lacaniana, para trabajar durante seis meses el tema de nuestras próximas Jornadas.
Los miembros de la NELcf en la Ciudad de México, cada uno con su estilo y su particular manera de transmisión, presentará y someterá a la discusión un trozo, un detalle, una perspectiva sobre el tema.
Nos proponemos, para este tercer tramo de trabajo de lectura, revisión y comentario de las conferencias dictadas por Freud el periodo de invierno de 1916-17 en la Universidad de Viena, dedicarnos al conjunto títulado Doctrina general de las neurosis, donde se introduce el síntoma a la serie iniciada con los actos fallidos y sueños como fenómenos probatorios de lo inconsciente y las leyes que lo rigen. A partir de la concepción del síntoma como una formacion que tiene un sentido y un propósito, Freud examina términos ya largamente conocidos por el psicoanálisis –el trauma y la angustia– así como otros de reciente inclusión para la época –la teoría de la libido y la transferencia–. Dichas conferencias son de un gran valor no solamente para quien busque acercarse a los conceptos psicoanalíticos, sino también para quien, ya habiendo trazado un recorrido, se interese por los giros, replanteamientos y problemáticas abiertas en esas disertaciones.
Camino al Congreso 2024 de la AMP “Todo el mundo es loco” una nueva serie nos reúne ante los rudimentos de las psicosis en el texto y la perspectiva de la clínica del sinthome. Atelier para las cosas de finura que la consistencia lógica de las locuras bajo transferencia y de las otras enseñan. En el “corazón histórico de la presentación de enfermos” con la rúbrica “de los confines” que Jacques-Alain Miller establece para la enseñanza de Jacques Lacan anterior a 1953, la investigación en torno al efecto retorno y las conversaciones desde Angers de las secciones clínicas.
Dos memorias, una literatura y el testimonio de uno de los analizantes de Sigmund Freud. A partir de tres escrituras decisivas del movimiento analítico, una pregunta sine quanon para el discurso analítico.
La práctica analítica con sujetos que padecen trastornos alimenticios confronta al analista con una clínica propia de la nueva época del inconsciente , bordeando los distintos estatutos del rechazo , la abolición del sujeto del deseo, las diversas modalidades de lazo con el Otro, y el goce que afecta de modo exponencial al cuerpo.
El sujeto con trastornos alimenticios se nos presenta como vacío en su relación con la palabra, envuelto en un goce sintomático impermeable a cualquier elaboración pero pleno en la experiencia de goce.
El interés de la mesa de lectura es hacer una introducción de los elementos de Lógica utilizados por Lacan en la transmisión de su enseñanza.
La construcción lógica no es azarosa, es producto de altas elaboraciones y observaciones por parte de Lacan, las cuales tendrán consecuencias en el posterior desarrollo de la teoría psicoanalítica. Desde sus primeros escritos hasta el último seminario, la Lógica y la idea de la formalización matemática ha sido de su interés para la formalización del discurso analítico, El estudio de los modelos, esquemas y grafos es una propuesta lógica de Lacan para la articulación psicoanalítica y aquello que lo hace por una lógica.
Argumento: La frase de Lacan «Todo el mundo es loco, es decir, es delirante» se convierte para J.- A. Miller «…en una brújula para guiarnos en la ultimísima enseñanza de Lacan, y en consecuencia, para guiarnos también en nuestra ultimísima práctica, ya que por un efecto de retroacción no podemos elucidar la enseñanza de Lacan sin ordenarla a partir de su última meta, por lo menos los que estemos al tanto de la misma. Y en la medida en que esta enseñanza siga condicionando la práctica analítica de hoy, esta brújula está llamada a tener allí una incidencia»
En esta vía, abordaremos las coordenadas principales de este Curso de J. A.- Miller considerando las consecuencias clínicas, epistémicas y políticas que se desprenden de esta orientación para nuestra formación, pues “…a nosotros nos toca tratar esa contingencia de lo real, solo nos queda arreglarnos con esto, es decir con la invención y la reinvención sin ningún fatalismo. Y por ello, a pesar del peso que tienen hoy en día la cantidad, la medida, y el número, todo esto queda a la merced de la contingencia y nos toca saber explotarlo”
En el Seminario 6 Lacan enuncia que el duelo es el reverso de la operación que autoriza la lógica de la forclusión, que sería el retorno del significante forcluido de lo simbólico en lo real. “El duelo, que es una pérdida verdadera, intolerable para el ser humano, le provoca un agujero en lo real. La relación que está en juego es la inversa de la que promuevo ante ustedes con el nombre de Verwerfung cuando les digo que lo es rechazado en lo simbólico reaparece en lo real […]. La dimensión intolerable, en sentido estricto, que se presenta a la experiencia humana no es la experiencia de nuestra propia muerte, que nadie tiene, sino la de la muerte de otro, cuando es para nosotros un ser esencial. Semejante pérdida constituye una Verwerfung, un agujero pero en lo real. En virtud de la misma correspondencia que articulo en la Verwerfung, este agujero resulta mostrar el lugar donde se proyecta precisamente el significante faltante”.
“Todo el mundo es loco”, dice Miller. Pero hay una locura que es la de todos (y del “para todos”) y otra que es la de cada quien, la del uno por uno.
Hoy día, nuestra “locura de todos» promueve una multiplicación e infinitización de identidades de género, que paradójicamente tienden a imponerse como un “para todos” que haría existir el La que faltaría para la armonía sexual.
Lo femenino, en tanto no universalizable, está más bien ligado a esa “Otra locura”, que no es locura del Todo y que no es del todo locura: “No locas del todo”. Cierta libertad y cierta locura, no toda… que atañe tanto al “verdadero emprendimiento del amor” para un hombre (J. Santiago) como al “hacerse Otra para sí misma” para una mujer.
Después del no-todo Hombres, nos interroga ahora el no locas del Todo. Con este seminario exploraremos la(s) clínica(s) de la sexuación a partir del comentario y discusión de casos, uno por uno, más allá de la proliferación de semblantes.
La interpretación en psicoanálisis se fundamenta en principios, no en recetas. El corte, como una de las modalidades de interpretación destacadas por Jacques Lacan, está en el corazón de la experiencia analítica. ¿Qué implica dicha operación de corte, bajo transferencia, en el marco de una sesión analítica? ¿Cómo concierne al analista? ¿Cuál es la diferencia entre alusión, puntuación, citación, resonancia, equívoco?
De cara a las XIII Jornadas de la NELcf “Cortes e Interpretaciones” , el Ciclo de Conferencias propuesto será una oportunidad para abordar estos problemas fundamentales que atañen a la teoría y la clínica.
En esta vía, se propiciará un espacio de trabajo abierto, desde la Escuela hacia la ciudad, convocando a todos los interesados en el psicoanálisis de orientación lacaniana, para trabajar durante seis meses el tema de nuestras próximas Jornadas.
Los miembros de la NELcf en la Ciudad de México, cada uno con su estilo y su particular manera de transmisión, presentará y someterá a la discusión un trozo, un detalle, una perspectiva sobre el tema.
Nos proponemos, para este tercer tramo de trabajo de lectura, revisión y comentario de las conferencias dictadas por Freud el periodo de invierno de 1916-17 en la Universidad de Viena, dedicarnos al conjunto títulado Doctrina general de las neurosis, donde se introduce el síntoma a la serie iniciada con los actos fallidos y sueños como fenómenos probatorios de lo inconsciente y las leyes que lo rigen. A partir de la concepción del síntoma como una formacion que tiene un sentido y un propósito, Freud examina términos ya largamente conocidos por el psicoanálisis –el trauma y la angustia– así como otros de reciente inclusión para la época –la teoría de la libido y la transferencia–. Dichas conferencias son de un gran valor no solamente para quien busque acercarse a los conceptos psicoanalíticos, sino también para quien, ya habiendo trazado un recorrido, se interese por los giros, replanteamientos y problemáticas abiertas en esas disertaciones.
El deseo no debe ser tomado como una ilusión ni como un deseo puro, hace presente en nuestras vidas, lo otro, lo diferente, lo que nos resulta tan difícil de soportar pero que también es el motor que puede llevarnos a querer algo por lo que nos ponemos en juego.
Partiendo del estatuto del deseo y de interpretación para Freud, en relación a la existencia de un plural de deseos y del cumplimiento de estos, a la concepción del deseo que desarrolla Lacan partiendo de la constitución del sujeto, pues es sobre la base de la noción de sujeto que se anuda el deseo.
Se trabajara el acento que la interpretación pone en un caso, en tanto uno por uno, sobre el significante y por tanto de su valor; dando la oportunidad de que pueda sonar otra cosa en ese Otro del analizante y del lado del deseo del analista, la apuesta de encontrar el resorte que no impida orientarse en el Otro del deseo.
Ubicando así lo que se juega en un análisis al que se puede advenir si nos permitimos a la experiencia y a arriesgarnos de la buena manera.
Argumento: La frase de Lacan «Todo el mundo es loco, es decir, es delirante» se convierte para J.- A. Miller «…en una brújula para guiarnos en la ultimísima enseñanza de Lacan, y en consecuencia, para guiarnos también en nuestra ultimísima práctica, ya que por un efecto de retroacción no podemos elucidar la enseñanza de Lacan sin ordenarla a partir de su última meta, por lo menos los que estemos al tanto de la misma. Y en la medida en que esta enseñanza siga condicionando la práctica analítica de hoy, esta brújula está llamada a tener allí una incidencia»
En esta vía, abordaremos las coordenadas principales de este Curso de J. A.- Miller considerando las consecuencias clínicas, epistémicas y políticas que se desprenden de esta orientación para nuestra formación, pues “…a nosotros nos toca tratar esa contingencia de lo real, solo nos queda arreglarnos con esto, es decir con la invención y la reinvención sin ningún fatalismo. Y por ello, a pesar del peso que tienen hoy en día la cantidad, la medida, y el número, todo esto queda a la merced de la contingencia y nos toca saber explotarlo”
En el Seminario 6 Lacan enuncia que el duelo es el reverso de la operación que autoriza la lógica de la forclusión, que sería el retorno del significante forcluido de lo simbólico en lo real. “El duelo, que es una pérdida verdadera, intolerable para el ser humano, le provoca un agujero en lo real. La relación que está en juego es la inversa de la que promuevo ante ustedes con el nombre de Verwerfung cuando les digo que lo es rechazado en lo simbólico reaparece en lo real […]. La dimensión intolerable, en sentido estricto, que se presenta a la experiencia humana no es la experiencia de nuestra propia muerte, que nadie tiene, sino la de la muerte de otro, cuando es para nosotros un ser esencial. Semejante pérdida constituye una Verwerfung, un agujero pero en lo real. En virtud de la misma correspondencia que articulo en la Verwerfung, este agujero resulta mostrar el lugar donde se proyecta precisamente el significante faltante”.
Sabemos que el niño es un sujeto de pleno derecho para nuestro quehacer clínico. Damos por sentado que hay inconsciente, que hacen interpretaciones sobre lo que el otro les dice. Que se establece una relación transferencial. En pocas palabras, que pueden hacer una experiencia analítica. Gozan y desean.
No obstante, el trabajo con niños y adolescentes tiene sus particularidades. Implica no solo al sujeto niño sino también a aquellos que lo cuidan. El inconsciente no es solo aquello que se dice o no se dice sino lo que se despliega en el juego. ¿Cómo pensar entonces la transferencia, el inconsciente, la interpretación en el trabajo con niños y adolescentes? ¿Hay un fin de análisis para ellos?
“Todo el mundo es loco”, dice Miller. Pero hay una locura que es la de todos (y del “para todos”) y otra que es la de cada quien, la del uno por uno.
Hoy día, nuestra “locura de todos» promueve una multiplicación e infinitización de identidades de género, que paradójicamente tienden a imponerse como un “para todos” que haría existir el La que faltaría para la armonía sexual.
Lo femenino, en tanto no universalizable, está más bien ligado a esa “Otra locura”, que no es locura del Todo y que no es del todo locura: “No locas del todo”. Cierta libertad y cierta locura, no toda… que atañe tanto al “verdadero emprendimiento del amor” para un hombre (J. Santiago) como al “hacerse Otra para sí misma” para una mujer.
Después del no-todo Hombres, nos interroga ahora el no locas del Todo. Con este seminario exploraremos la(s) clínica(s) de la sexuación a partir del comentario y discusión de casos, uno por uno, más allá de la proliferación de semblantes.
La interpretación en psicoanálisis se fundamenta en principios, no en recetas. El corte, como una de las modalidades de interpretación destacadas por Jacques Lacan, está en el corazón de la experiencia analítica. ¿Qué implica dicha operación de corte, bajo transferencia, en el marco de una sesión analítica? ¿Cómo concierne al analista? ¿Cuál es la diferencia entre alusión, puntuación, citación, resonancia, equívoco?
De cara a las XIII Jornadas de la NELcf “Cortes e Interpretaciones” , el Ciclo de Conferencias propuesto será una oportunidad para abordar estos problemas fundamentales que atañen a la teoría y la clínica.
En esta vía, se propiciará un espacio de trabajo abierto, desde la Escuela hacia la ciudad, convocando a todos los interesados en el psicoanálisis de orientación lacaniana, para trabajar durante seis meses el tema de nuestras próximas Jornadas.
Los miembros de la NELcf en la Ciudad de México, cada uno con su estilo y su particular manera de transmisión, presentará y someterá a la discusión un trozo, un detalle, una perspectiva sobre el tema.
Nos proponemos, para este tercer tramo de trabajo de lectura, revisión y comentario de las conferencias dictadas por Freud el periodo de invierno de 1916-17 en la Universidad de Viena, dedicarnos al conjunto títulado Doctrina general de las neurosis, donde se introduce el síntoma a la serie iniciada con los actos fallidos y sueños como fenómenos probatorios de lo inconsciente y las leyes que lo rigen. A partir de la concepción del síntoma como una formacion que tiene un sentido y un propósito, Freud examina términos ya largamente conocidos por el psicoanálisis –el trauma y la angustia– así como otros de reciente inclusión para la época –la teoría de la libido y la transferencia–. Dichas conferencias son de un gran valor no solamente para quien busque acercarse a los conceptos psicoanalíticos, sino también para quien, ya habiendo trazado un recorrido, se interese por los giros, replanteamientos y problemáticas abiertas en esas disertaciones.
Camino al Congreso 2024 de la AMP “Todo el mundo es loco” una nueva serie nos reúne ante los rudimentos de las psicosis en el texto y la perspectiva de la clínica del sinthome. Atelier para las cosas de finura que la consistencia lógica de las locuras bajo transferencia y de las otras enseñan. En el “corazón histórico de la presentación de enfermos” con la rúbrica “de los confines” que Jacques-Alain Miller establece para la enseñanza de Jacques Lacan anterior a 1953, la investigación en torno al efecto retorno y las conversaciones desde Angers de las secciones clínicas.
Dos memorias, una literatura y el testimonio de uno de los analizantes de Sigmund Freud. A partir de tres escrituras decisivas del movimiento analítico, una pregunta sine quanon para el discurso analítico.
El interés de la mesa de lectura es hacer una introducción de los elementos de Lógica utilizados por Lacan en la transmisión de su enseñanza.
La construcción lógica no es azarosa, es producto de altas elaboraciones y observaciones por parte de Lacan, las cuales tendrán consecuencias en el posterior desarrollo de la teoría psicoanalítica. Desde sus primeros escritos hasta el último seminario, la Lógica y la idea de la formalización matemática ha sido de su interés para la formalización del discurso analítico, El estudio de los modelos, esquemas y grafos es una propuesta lógica de Lacan para la articulación psicoanalítica y aquello que lo hace por una lógica.
Argumento: La frase de Lacan «Todo el mundo es loco, es decir, es delirante» se convierte para J.- A. Miller «…en una brújula para guiarnos en la ultimísima enseñanza de Lacan, y en consecuencia, para guiarnos también en nuestra ultimísima práctica, ya que por un efecto de retroacción no podemos elucidar la enseñanza de Lacan sin ordenarla a partir de su última meta, por lo menos los que estemos al tanto de la misma. Y en la medida en que esta enseñanza siga condicionando la práctica analítica de hoy, esta brújula está llamada a tener allí una incidencia»
En esta vía, abordaremos las coordenadas principales de este Curso de J. A.- Miller considerando las consecuencias clínicas, epistémicas y políticas que se desprenden de esta orientación para nuestra formación, pues “…a nosotros nos toca tratar esa contingencia de lo real, solo nos queda arreglarnos con esto, es decir con la invención y la reinvención sin ningún fatalismo. Y por ello, a pesar del peso que tienen hoy en día la cantidad, la medida, y el número, todo esto queda a la merced de la contingencia y nos toca saber explotarlo”
IV JORNADAS DE LA NEL-cf CDMX: PRESENCIAS DEL ANALISTA
TEXTO DE ORIENTACIÓN EJE: Presencias… en la ciudad y la época
Un despertar
¿Cuál podría ser la incidencia política un poco más allá de esta presentación negativa?
Tal vez cierto efecto de despertar. Un despertar respecto de aquello de lo que en
definitiva se trata en los ideales sociales: del goce y de la distribución del plus-de-gozar.
(Jacques-Alain Miler)
Desde hace tiempo los analistas hemos afrontado el desafío ético de hacer a un lado la rutina del consultorio y asumir una presencia en los dispositivos comprometidos con la salud mental en nuestras ciudades, así como en los debates públicos con el Otro social. En este aspecto, no cabe desconocer que, más allá de la vigencia del discurso del analista y sus consecuencias prácticas, en una perspectiva más amplia, se trata del consentimiento a la convocatoria de Lacan de alcanzar “una incidencia política donde el psicoanalista tendría su lugar si fuese capaz de ello”[1]. Por supuesto, para estar a la altura de la época, ello exige al deseo del analista el miramiento por los síntomas de la actualidad, los impases en lo social, y el aggiornamiento permanente respecto de los discursos emergentes que se imponen al compás de cada tiempo.
Ahora bien, ¿De qué presencia se trata?, ¿Cómo pensar esa presencia?
Más allá del analista causa del trabajo del sujeto supuesto saber, correspondiente a la dimensión transferencial del inconsciente, encontramos una clara orientación en el Capítulo X del Seminario 11 Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis. Allí Lacan nos advierte sobre la presencia del analista, primordialmente, como una manifestación del inconsciente. Y es sólo desde ahí como tiene lugar su presencia real, más allá del par imaginario del a-a´, desidealizando, a su vez, la figura y la persona del analista, para reducir su función a la de un resto, “un resto fecundo” –en tanto una presencia muy particular que se pone en juego solamente en el arte de escuchar del analista. “El arte de escuchar casi equivale al del bien decir”[2].
Como vemos, ello no será ciertamente exclusivo de la experiencia analítica. Esta función estará activa en todos los vínculos donde se trata de la relación del sujeto con el saber y el goce. “Se trata en estos vínculos siempre de una relación transferencial encarnada en la persona que se supone agente de la acción, pero esa atribución de saber a la persona deja en realidad encubierta la relación del sujeto con el saber de su propio inconsciente, verdadero agente del vínculo”[3]. En la medida en que el analista con su acto recuerde la banalidad del sentido de las palabras, opere como el dedo elevado de San Juan tal como Lacan evoca en “La dirección de la cura”, señalando cómo somos hablados, que la referencia del lenguaje no existe, hará presente la perspectiva de lo real más allá de la realidad.
En este sentido, la ironía sirve muy bien a la posición del analista a la hora de perturbar los ideales sociales y revelar su naturaleza de semblantes respecto a un real que sería del goce. “Está más bien, como Sócrates, para hacer temblar, para hacer vacilar los ideales, a veces simplemente poniéndolos entre comillas, quebrando un poco los significantes-amo de la ciudad”[4]. Sin embargo, por otro lado, Lacan nos enseñó que los ideales son semblantes, arbitrarios, pero que esos semblantes son necesarios. La sociedad se sostiene gracias a sus semblantes, no hay sociedad sin identificaciones. Entonces si, por un lado, es cierto, el padre es un semblante, y, sí, se puede prescindir de él … sin embargo, no hay que olvidar que ¡a condición de saberlo utilizar!
Pensar la presencia del analista como la provocación de un despertar implica, necesariamente, sostener un deseo vivo. Seis años antes de su Seminario 11, en el texto La dirección de la cura y los principios de su poder, paradójicamente, Lacan dará al analista el lugar del muerto, dejando el yo a un lado para que pueda surgir el lugar del Otro para el sujeto, el inconsciente, su verdadera pareja, en el registro de lo simbólico. Es el lugar de la causa de la división del sujeto que Lacan formalizará más adelante con la función del objeto a, presencia irreductible.
Para finalizar, cabe mencionar el concepto de “acción lacaniana” que Jacques-Alain Miller ha propuesto para nombrar en el seno de la Asociación Mundial de Psicoanálisis la política de incidencia en los ámbitos políticos y sociales como el correlato del acto analítico en la sociedad. Si Lacan ha formulado que «No hay clínica del sujeto sin clínica de la civilización» es porque la topología del inconsciente lacaniano –allí donde el analista manifiesta su presencia- resulta, entre un afuera y un adentro, de una extimidad irreductible. ¿Cómo el deseo del analista pudiera, entonces, prescindir de la ciudad y la época?
[1] Miller, J.-A., El psicoanálisis, la ciudad y las comunidades.
[2] Lacan, J., El Seminario Libro 11 Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis, Editorial Paidós, p. 129.
[3] Bassols, M., Presencia del analista, Cuadernos del INES Nro 14, Editorial Grama, p. 99.
[4] Miller, J.-A., El psicoanálisis, la ciudad y las comunidades.