IX Asamblea General Ordinaria – 3a Permutación de Directorios

Palabras de la nueva directora de la NELcf – Sección Ciudad de México
Discurso de la Directora entrante, Aliana Santana
Ciudad de México, 29/10/2022

Buenos días a todos.

Aquí estamos, en cuerpo, presentes, miembros y asociados de la Sección Ciudad de México de la NEL del Campo Freudiano. Hoy se lleva a cabo la permutación del directorio de nuestra Sección. No puedo dejar de recordar que mi llegada a este país, a esta ciudad y a esta, la entonces Sede Ciudad de México de la NEL, se llevó a cabo en enero del 2015, es decir seis meses después de haberse dado el pasaje de Delegación a Sede de la NEL. En ese momento el directorio estaba precedido por Viviana Berger, quien ya en su discurso como primera directora de la Sede me había nombrado como una de las tres nuevas miembros que vendrían a radicarse en la Ciudad de México y a formar parte de la Sede. A partir de ese directorio se han llevado a cabo tres permutaciones de directorio. Esta, la de hoy, es la tercera.

No toda permutación implica o garantiza un buen funcionamiento o gestión. Se espera el mejor de los funcionamientos y la más limpia y orientada gestión. A veces es así o inclusive mejor de lo esperado y a veces no.  La permutación garantiza, en todo caso, el privilegio de la lógica del no todo por encima de la lógica grupal.

Permutar en la Escuela de Lacan, es coherente con el espíritu de conservar la orientación lacaniana y apuntar a su reforzamiento, en tanto los miembros que la conforman, uno por uno, cada uno en su soledad subjetiva, acepten de “buen grado” o de buena manera la permutación.

Esto me lleva a pensar en cuatro puntos, que siempre me orientan y que tomé hace ya muchos años del texto de Jacques Alain Miller titulado Affectio Societatis:

  1. ¨Para que haya una Escuela, ante todo es cuestión de que haya affectio societatis¨
  2. ¨La affectio societatis no es el amor¨
  3. ¨Lacan invita a los analistas de su Escuela a ser buenos compañeros. ¿Es humor? ¿Hay que tomar esto en serio? Cada uno elige¨
  4. Affectio societatis otra manera de decir ¨nos entendemos¨, es otra manera de decir ¨este es el pan y el vino que compartimos¨

Se me ha honrado con la invitación a ocupar la función de directora por los próximos dos años. No es una responsabilidad que acepto sin un poco de temor, pero a ese temor sólo puedo hacerle frente con lo que causa el trabajo de Escuela, en la Escuela: la causa analítica.

Estaré sola en esta función, pero no sin otros. Paula Del Cioppo, en la función de secretaria y Fernando España en la de tesorería, me acompañaran muy de cerca en tan importante experiencia de Escuela.

Desde la primera reunión que sostuvimos, hace ya unos 4 meses, como directorio entrante, que nos dimos cuenta de que compartíamos, lo que desde entonces hemos llamado: los propósitos del directorio.

  1. Mantener lo que funciona y repensar lo que no.
  2. Causar el trabajo entre los miembros de la Sección. Ir más allá del trabajo por los miembros, para los miembros o con los miembros.
  3. Privilegiar la singularidad de nuestra Sección y su relación con la Escuela, en cuyo centro está el Pase y la pregunta por lo que es un analista.
  4. Seguir ofreciendo espacios de formación para miembros, asociados e interesados en el psicoanálisis de orientación lacaniana.
  5. Impulsar y privilegiar el encuentro presencial en el local de la Sección Ciudad de México.

Sobre cada uno de estos puntos o propósitos, traducidos en un programa de trabajo, hablaremos el viernes 16 de diciembre, a las 7:30pm, aquí en nuestro local. Agenden esa fecha. Aquí los estaremos esperando. Mientras tanto, las actividades programadas hasta diciembre no se detienen.

La Sección Ciudad de México, de la NELcf cuenta entre sus miembros con dos AME, Analistas Miembros de la Escuela y una AE, Analista de la Escuela, en ejercicio hasta noviembre del 2024. Si bien tanto los AME como los AE son de la Escuela, nuestra Sección debe saber hacer y bien utilizar el hecho y la fortuna de que estas colegas hacen vida, habitan esta Sección. El directorio sabe y agradece que cuenta con ellas.

Enmarcada en las XII Jornadas de la NELcf, en Guatemala, hace ya dos semanas, se llevó a cabo lo que se denominó, un encuentro con el pase. Allí, Marcela Almanza, Analista de la Escuela, presentó un texto titulado ¨Un encuentro singular¨. Marcela, nos recordó en su texto una cita de Miller en Teoría de Turín acerca del sujeto de la Escuela, y la misma me hizo pensar en la evidente dificultad que implica formar parte, consentir a la lógica Escuela.

Esta es la cita: ¨Una Escuela está para ser interpretada, es interpretable analíticamente…La Escuela concebida por Lacan es un conjunto lógicamente inconsistente, siempre atravesada por el no todo, habitada no sólo por una excepción única, sino más bien por una serie de excepciones, de soledades no comparables las unas a las otras, por sujetos barrados, fijados a significantes amos y habitados por la extimidad de un plus de goce particular para cada uno¨

Y ante esta dificultad, la que implica formar parte de una Escuela, pienso, que la única vía posible para ¨no morir en el intento¨ es la experiencia personal de análisis hasta sus últimas consecuencias y mientras ella discurre, hacer el mejor uso posible de lo que mencioné al iniciar estas palabras, es decir, la affectio societatis.

No puedo terminar sin agradecer a los miembros y asociados que han aceptado la invitación al trabajo en alguna de las siete Comisiones que estarán en funcionamiento en esta nueva gestión.

Recordemos que cada miembro de una Escuela, está invitado a poner en acto su relación con la orientación lacaniana, con el Uno de la Escuela, al asumir en cuerpo, el compromiso de ocupar lugares y funciones en este tipo de institución donde se inscribe la Escuela, que siempre privilegia, como indica Miller en su texto La doctrina secreta de Lacan sobre la Escuela, el “punto de vista analítico”, el discurso analítico y el deseo de Escuela.

Privilegiar el punto de vista analítico, el discurso analítico y el deseo de Escuela, no es otra cosa que privilegiar la experiencia analítica misma, la nuestra, la propia, esa que apunta a la producción de una analista, esa que atraviesa o ha atravesado a cada miembro de la Escuela.

Gracias Edna Gómez, miembro responsable de la Comisión de Carteles. Gracias Edgar Vázquez, Cinthya Estrada, Rosana Fautsch, Areli Leeworio por acompañarla en su gestión.

Gracias Vianney Cisneros, asociada a la Sección y quien ocupará la función de enlace con el Directorio, más específicamente con Fernando España, en la Comisión de Difusión y Comunicación. Gracias María Victoria Ferrero, Eréndira Molina, Juan Citlaltemoc y Maricela García, quienes acompañarán a Vianney en su gestión.

Gracias Raúl Sabbagh, asociado a la Sección y quien ocupará la función de enlace con el Directorio, más específicamente con Paula Del Cioppo, en la Comisión de Conexiones. Gracias María Victoria Ferrero, quien estará acompañando a Raúl en su gestión.

Gracias María del Carmen García, miembro responsable de la Comisión de Librería. Gracias Maricela García y Raúl Sabbagh, quienes la acompañarán en su gestión.

Gracias Ángel Sanabria, miembro responsable de la Comisión de Biblioteca. Gracias Andreina Solórzano, Vianney Cisneros, José Juan Ruiz y Maricela García, quienes estarán acompañándolo en su gestión.

Gracias Rosana Fautsch y José Juan Ruíz, asociados de la Sección y quienes ocuparán la función de enlace con el Directorio, más específicamente con Aliana Santana, en la Comisión de publicación digital, Revista Glifos. Gracias Eréndira Molina, Xóchitl Enríquez y Juan Citlaltemoc por acompañarlos en su gestión.

Gracias Silvana Di Rienzo, miembro responsable de la Comisión de publicaciones impresas.

Y gracias, Viviana Berger, miembro responsable de la Comisión Ad-Hoc para la elaboración de los nuevos reglamentos de la Sección Ciudad de México de la NELcf.

La permutación del Directorio, pasar y recibir el testigo en esta experiencia de Escuela, da cuenta hoy de la transferencia de trabajo que se lleva a cabo en su interior.

La transición hacia la permutación ha sido infinitamente amable, suave, rigurosa, intensa, emocionante y muy analítica.

Buen trabajo Carolina, Silvana y Ángel, en la gestión como directorio, que hoy culmina. Agradezco enormemente su confianza.

Tomamos así, Paula, Fernando y yo, el testigo. Ahora, solo resta continuar durante los próximos dos años el camino de una experiencia de Escuela que llevaremos a cabo desde el directorio, no sin todos ustedes, miembros y asociados de la Sección Ciudad de México de la NELcf.

IV JORNADAS DE LA NEL-cf CDMX:
PRESENCIAS DEL ANALISTA TEXTO DE ORIENTACIÓN
EJE: Presencias… en la ciudad y la época

Un despertar

¿Cuál podría ser la incidencia política un poco más allá de esta presentación negativa?

Tal vez cierto efecto de despertar. Un despertar respecto de aquello de lo que en

definitiva se trata en los ideales sociales: del goce y de la distribución del plus-de-gozar.

 (Jacques-Alain Miler)

Desde hace tiempo los analistas hemos afrontado el desafío ético de hacer a un lado la rutina del consultorio y asumir una presencia en los dispositivos comprometidos con la salud mental en nuestras ciudades, así como en los debates públicos con el Otro social. En este aspecto, no cabe desconocer que, más allá de la vigencia del discurso del analista y sus consecuencias prácticas, en una perspectiva más amplia, se trata del consentimiento a la convocatoria de Lacan de alcanzar “una incidencia política donde el psicoanalista tendría su lugar si fuese capaz de ello”[1]. Por supuesto, para estar a la altura de la época, ello exige al deseo del analista el miramiento por los síntomas de la actualidad, los impases en lo social, y el aggiornamiento permanente respecto de los discursos emergentes que se imponen al compás de cada tiempo.

Ahora bien, ¿De qué presencia se trata?, ¿Cómo pensar esa presencia?

Más allá del analista causa del trabajo del sujeto supuesto saber, correspondiente a la dimensión transferencial del inconsciente, encontramos una clara orientación en el Capítulo X del Seminario 11 Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis. Allí Lacan nos advierte sobre la presencia del analista, primordialmente, como una manifestación del inconsciente. Y es sólo desde ahí como tiene lugar su presencia real, más allá del par imaginario del a-a´, desidealizando, a su vez, la figura y la persona del analista, para reducir su función a la de un resto, “un resto fecundo” –en tanto una presencia muy particular que se pone en juego solamente en el arte de escuchar del analista. “El arte de escuchar casi equivale al del bien decir”[2].

Como vemos, ello no será ciertamente exclusivo de la experiencia analítica. Esta función estará activa en todos los vínculos donde se trata de la relación del sujeto con el saber y el goce. “Se trata en estos vínculos siempre de una relación transferencial encarnada en la persona que se supone agente de la acción, pero esa atribución de saber a la persona deja en realidad encubierta la relación del sujeto con el saber de su propio inconsciente, verdadero agente del vínculo”[3]. En la medida en que el analista con su acto recuerde la banalidad del sentido de las palabras, opere como el dedo elevado de San Juan tal como Lacan evoca en “La dirección de la cura”, señalando cómo somos hablados, que la referencia del lenguaje no existe, hará presente la perspectiva de lo real más allá de la realidad.

En este sentido, la ironía sirve muy bien a la posición del analista a la hora de perturbar los ideales sociales y revelar su naturaleza de semblantes respecto a un real que sería del goce. “Está más bien, como Sócrates, para hacer temblar, para hacer vacilar los ideales, a veces simplemente poniéndolos entre comillas, quebrando un poco los significantes-amo de la ciudad”[4]. Sin embargo, por otro lado, Lacan nos enseñó que los ideales son semblantes, arbitrarios, pero que esos semblantes son necesarios. La sociedad se sostiene gracias a sus semblantes, no hay sociedad sin identificaciones. Entonces si, por un lado, es cierto, el padre es un semblante, y, sí, se puede prescindir de él … sin embargo, no hay que olvidar que ¡a condición de saberlo utilizar!

Pensar la presencia del analista como la provocación de un despertar implica, necesariamente, sostener un deseo vivo. Seis años antes de su Seminario 11, en el texto La dirección de la cura y los principios de su poder, paradójicamente, Lacan dará al analista el lugar del muerto, dejando el yo a un lado para que pueda surgir el lugar del Otro para el sujeto, el inconsciente, su verdadera pareja, en el registro de lo simbólico. Es el lugar de la causa de la división del sujeto que Lacan formalizará más adelante con la función del objeto a, presencia irreductible.

Para finalizar, cabe mencionar el concepto de “acción lacaniana” que Jacques-Alain Miller ha propuesto para nombrar en el seno de la Asociación Mundial de Psicoanálisis la política de incidencia en los ámbitos políticos y sociales como el correlato del acto analítico en la sociedad. Si Lacan ha formulado que «No hay clínica del sujeto sin clínica de la civilización» es porque la topología del inconsciente lacaniano –allí donde el analista manifiesta su presencia- resulta, entre un afuera y un adentro, de una extimidad irreductible. ¿Cómo el deseo del analista pudiera, entonces, prescindir de la ciudad y la época?

 

[1] Miller, J.-A., El psicoanálisis, la ciudad y las comunidades.

[2] Lacan, J., El Seminario Libro 11 Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis, Editorial Paidós, p. 129.

[3] Bassols, M., Presencia del analista, Cuadernos del INES Nro 14, Editorial Grama, p. 99.

[4] Miller, J.-A., El psicoanálisis, la ciudad y las comunidades.