Argumento
En este Seminario trataremos el tema de la dirección de la cura en la orientación lacaniana, a partir de la lectura de los textos clásicos de Lacan «La dirección de la cura y los principios de su poder», «Intervención sobre la transferencia», y «Variantes de la cura tipo». El intento del trabajo será de leer estos textos clásicos a la luz de las exigencias de la clínica de hoy, y teniendo en cuenta los desarrollos de la última enseñanza de Lacan.
Los pivotes de la rectificación subjetiva, de la instalación de la transferencia, de las condiciones y de las modalidades de la interpretación, de la posición del analista en la cura – temas claves en estos escritos – serán reinterrogados a la luz del inconsciente como real es decir, del pasaje epocal del inconsciente a la noción de parlêtre o hablanteser. Lo haremos siguiendo las puntuaciones que nos ha ofrecido Jacques-Alain Miller en su lectura reciente de Lacan en su texto «El inconsciente y el cuerpo hablante».
Teniendo en cuenta las nuevas formas de malestar que se manifiestan y se desencadenan masivamente en las ultimas décadas en el tiempo lógico del pasaje a la pubertad, hemos elegido también como referencia de lectura el escrito del ultimísimo Lacan «Prefacio a El despertar de la primavera» de 1974. Este texto nos esclarecerá sobre los impasses en la adolescencia contemporánea, y nos ayudará en pensar con Lacan el problema de la dirección de la cura en el siglo XXI.
Ponentes a cargo de los segmentos del Seminario:
- Disciplina del comentario: Carolina Puchet Dutrénit y Gabriel Roel
- Lógica de la cura: Edna Gomez Murillo y Aliana Santana
- Perspectivas del concepto: Cintyha Estrada Plançón y José Juan Ruiz Reyes
Párrafo escogido por Carolina Puchet Dutrénit.
Extraído del texto: El inconsciente y el cuerpo hablante, Jacques-Alain Miller, Presentación del tema del X Congreso de la AMP en Río de Janeiro, 2016. http://www.wapol.org
«La interpretación no es un fragmento de construcción que apunta a un elemento aislado de la represión, como pretendía Freud. No es la elucubración de un saber. Tampoco es un efecto de verdad absorbido enseguida por la sucesión de las mentiras. La interpretación es un decir que apunta al cuerpo hablante, y para producir un acontecimiento, para llegar a las tripas, decía Lacan – eso no se anticipa, sino que se verifica con efecto retroactivo (après coup), porque el efecto de goce es incalculable. Todo lo que el análisis puede hacer es concordar con la pulsación del cuerpo hablante para insinuarse en el síntoma. Cuando se analiza el inconsciente, el sentido de la interpretación es la verdad. Cuando se analiza el parlêtre, el cuerpo hablante, el sentido de la interpretación es el goce. Este desplazamiento de la verdad al goce da la medida de aquello en lo que se convierte la práctica analítica en la era del parlêtre.»
Párrafo escogido por Gabriel Roel.
Extraído del texto: Dirección de la cura y los principios de su poder, Jacques Lacan, Escritos 2, Siglo XXI, editores argentina, 2002. Párrafo 18, Parte V
«¿A qué silencio debe obligarse ahora el analista para sacar por encima de ese pantano el dedo levantado del San Juan de Leonardo, para que la interpretación recobre el horizonte deshabitado del ser por donde debe desplegarse la virtud alusiva?»